martes

It's the economy, stupid! (2)

Sacar tiempo en una profesión tan absorbente como las Relaciones Públicas es complicado. La mayor parte del tiempo ‘extra’ lo empleo en prensa escrita y on-line, blogs, e informes sectoriales. Aunque siempre hay tiempo para libros tan reveladores como el de Leslie Gaines-Ross, ‘Reputación corporativa: 12 pasos para salvaguardar y recuperar la reputación’, del qué estoy preparando un post más extenso, pues el tema lo merece, y el libro también.

Y como no, el libro habla de crisis y reputación. Y, por supuesto, algunas de las recetas del libro son aplicables a la situación económica actual (1)

Leo, no sin cierto asombro, el paquete de medidas del gobierno de Zapatero. Los titulares derivados de él son, como todo el mundo puede imaginar, contrapuestos. Pero me sigue asombrando que a pesar de que "el gobierno ha optado por un lenguaje más realista" -expresa El País-, siga sin emplear el lenguaje de la realidad: la que se vive en la calle. Para ZP no hay crisis, tan sólo un período díficil. En ese punto no puedo sino repasar mentalmente el libro que estoy leyendo y sus doce pasos . Me detengo en el séptimo: ‘reajustar la cultura corporativa’. Es decir, si un elemento externo, como la crisis económica mundial, ha provocado que la reputación de Zapatero disminuya, es decir que su popularidad descienda, es que algo se ha hecho mal –paso quinto, por cierto: evaluar qué se ha hecho mal. Sobre todo, si tenemos en cuenta que el principal partido de la oposición ha estado ausente desde las elecciones, 'missing in combat', y nunca mejor dicho.

Por tanto, habrá que cambiar y no sólo la forma de comunicar –que se ha hecho mal, es obvio–, sino también la forma de encarar la situación: de actuar frente a la crisis.

Como es lógico, para llegar del 5 al 7, hay que pasar por el 6, al que Leslie nombra como ‘medir, medir y nuevamente medir’. Si lo trasladamos a la política, el paso podría llamarse: 'reunirse, reunirse y nuevamente reunirse'. Es decir, hablar con todos los sectores económicos y sociales y sacar conclusiones. Lo curioso es que empresarios y sindicatos están bastante de acuerdo… En el haber de Zapatero está la presentación del informe presidencial ante los empresarios.

El siguiente paso debería ahondar en ese acercamiento a la realidad y, como no, empezar a cuidar la imagen de España en el exterior. Nuestro país necesita la inversión externa y para ello la reputación e imagen de España como país sólido y estable es fundamental. No entiendo, sino en clave política, la crítica noticia del diario Expansión a este respecto: "Zapatero se encomienda a la publicidad internacional para ahuyentar la crisis". Sinceramente, no puede ser de otra manera. Quizá deberían leer el magnífico informe que cada trimestre prepara el Real Instituto Elcano basado en su "Observatorio Permanente de la Imagen Exterior de España en la Prensa Internacional". Su análisis es revelador y profundizar en los aspectos positivos y negativos que resalta, más aún.

(1) Siempre he defendido que las Relaciones Públicas, como ciencia social que es, bebe de las mismas fuentes que la Economía. La paradoja es que la primera hace de la segunda su objeto preferente, produciendo, en numerosas ocasiones, una unión simbiótica. Desafortunadamente, aún hay muchos directivos, políticos y responsables que no son capaces de ver la simbiosis y ven a las Relaciones Públicas como un parásito beneficioso pero prescindible.

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1 comentarios:

Anonymous Anónimo ha dicho...

Hace unas semanas vimos un ejemplo de cómo este Gobierno ha colaborado, en algunos aspectos, a ofrecer una imagen distorsionada de España.
The New York Times publicó un reportaje elaborado con el discurso oficial sobre el agua: no tenemos agua, nos convertimos en un desierto, Murcia es una región llena de campos de golf y especulación, etc.
En http://www.agencia-de-comunicacion.es/consultoria-de-comunicacion/agencia-de-comunicacion/la-importancia-de-la-comunicacion-institucional-ii/218/ puede verse algo más.
Si el Gobierno tuviera un discurso distinto en esta materia, quizá el reportaje de The New York Times hubiera contado justo lo contrario: España tiene mucha agua y la gestiona bien, hay un crecimiento armónico y respetuoso con el medio ambiente, compensa invertir aquí...

6:16 p. m.  

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